miércoles, 20 de mayo de 2009

Cáncer linfático (mi diagnóstico y tratamiento)II

Mi primera sesión
No se si esto le pasa a todo el mundo, pero por lo menos a mi, la palabra quimioterapia me suena a algo radiactivo, a rayos gamma o algo así.
Pues nada más lejos de la realidad, la quimioterapia consiste en diluir un fármaco en un bote de suero fisiológico. Una vez diluido te lo van inyectando en la vena mediante un gotero conectado en la pata delantera. Depende del fármaco que te toque esa semana y de la velocidad del gotero cada sesión puede durar de 30 minutos a 1 hora.
Antes de cada sesión me realizaban un hemograma completo para comprobar que todo estaba bien.

Por si a alguien le interesa el precio, en el hospital veterinario cada sesión costaba entre 60-100 euros dependiendo del fármaco y de las pruebas que tocasen esa semana.

Desde la primera sesión noté muchísima mejoría en tres días los ganglios y el abdomen volvieron a su estado normal, yo estaba muy animada y volví a tener apetito.
Nunca he tenido efectos secundarios, no se me ha caído el pelo, ni he tenido vómitos ni diarrea y por extraño que parezca cunado salía de cada sesión no me sentía mal, ni cansada, ni aburrida, al contrario, salía con muchas ganas de correr y jugar porque, claro, después de estar 1 hora sin moverme en una mesa, solo tenía ganas de liberar energía.

Al principio estuve acudiendo a mis sesiones una vez por semana durante 4 meses con los descansos que establece el protocolo (leer entrada quimioterapia teoría).En este tiempo los síntomas no volvieron a aparecer.

Después de este periodo las sesiones se espaciaron cada quince días.
En esas semanas entre sesiones a veces se me inflamaba algún ganglio, sobretodo los de la garganta, pero normalmente con la siguiente sesión se me quitaban.
Estuve así 6 meses hasta que tuve una pequeña recaída en Diciembre del 2008.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi perrito kiwi tiene once años, hermoso como todos. Hace una semana noté sus ganglios inflamados en la garganta y lo primero que me pregunté es si los perros sufren de amigdalitis como los humanos. Bueno, lo llevé a la clínica, después de haber leído sobre enfermedades con estas características, y lloré hasta enfermarme de los nervios, tuve una crisis. Le hicimos exámenes de laboratorio completos, todo negativo, una punción en uno de sus abultamientos, no se observaba nada, y por último eco en toda la zona de su pancita, se encontró dos "mazas" como dijo el médico, una al lado de la vejiga y otra al lado del vaso, el mismo que ya no estaba bien, los demás órganos sin problemas. Todo ésto sin la fuerza suficiente para soportarlo, sólo llorando desesperadamente.
Hoy, empecé con un tratamiento con un jarabe que se llama birm, compuesto a base de una planta dulcamara, tallos y raíz. Estoy nerviosa, pero controlada. Rezos, velas encendidas, y esperanzas para ver que sucede luego. Contaré algún resultado, está en observación. Si alguien más sabe sobre este tratamiento, cuéntenmelo por favor.